CACO BARCELLOS Y CIAO CAVECHINI, LAS 35 PARA UN MEJOR PERIODISMO CULTURAL
El taller, que se realiza en el barrio Nelson Mandela gracias al programa Periodismo al barrio de la FNPI, la Fundación Tenaris Tubocaribe y la Fundación PROA, está enfocado en explorar nuevas formas de narrar, alejadas de las fórmulas tradicionales y siempre respaldadas por una sólida investigación y reportería. En la actividad participan 12 jóvenes periodistas de 6 países de América Latina
1.“¿Que cómo se hace un reportaje? ¡No sé! Cada uno debe encontrar su método, y cada método, para mí, se va descubriendo en la calle. Yo no conozco la verdad porque estoy en busca de ella. Me fascina el descubrimiento permanente. Es importante la búsqueda del misterio”.
2. Es mejor una acción que una opinión. Los entrevistados no solo deben contar lo que hacen, sino que deben mostrarlo.
3. La diversidad de fuentes enriquece el relato. Deben ser fuentes que se contrapongan, que se complementen. El reportero tiene la obligación de verificar que cada palabra que le digan es cierta.
4. La dupla aventura y relato, acción e investigación es muy efectiva.
5. Es importante “iluminar los bastidores del trabajo”, el detrás de cámara de la investigación. Éste es tan importante como la historia misma. “La dinámica que se genera en la búsqueda del contenido siempre es relevante”, por eso debe hacerse siempre con ética y responsabilidad.
6. En las zonas de conflictos hay que narrar el paso a paso. Se da un paso adelante y otro atrás. Lo importante es tener dudas porque, como reporteros, siempre se está en un proceso de aprendizaje. La duda es fundamental porque ahí se produce la sorpresa, el descubrimiento.
7. Los reporteros deberían poder asumir la posición del iluminador, del productor, del reportero por si se presenta algún problema. Así, pueden asumir cualquier parte del proceso de investigación.
8. Se deben establecer los límites con las fuentes y establecer una relación de confianza pero sin crear falsas expectativas.
9. Esa confianza se logra a través de la inmersión, y con el tiempo. Pero también con los resultados del trabajo que debería ser siempre un reflejo de la pluralidad de visiones.
10. Es indispensable tener en cuenta tres fases, tres momentos para construir un reportaje:
- Buscar toda la información posible antes de ir a la calle.
- Salir a la calle. Comprobar o desmentir, dudar, captar informaciones.
- Reflexionar: este es un momento de creación artística.
11. La función principal del reportaje audiovisual es mostrar los conflictos que no están explícitos.
12. Hay que ir siempre más allá de una simple entrevista. La función del reportero es establecer la verdad de lo que cada quien habla porque cada quien va a presentar su versión de la forma más interesante pero debemos eliminar la historia sensacionalista. Los reporteros piden al entrevistado que no solo hable de su historia, sino que la muestre, que le permita acompañarlo en su historia.
13. “¿De qué manera nos aproximamos a la historia de las personas? El Facebook de su vida (esa historia aparente que nos muestran en un primer acercamiento) se diluye luego de dos o tres días de acompañamiento”. Ahí empieza a aparecer lo interesante.
14. La acción es aliada de la comprobación. Para comprobar la verdad lo ideal es mostrar toda las dificultades que se presentan en el proceso de encontrarla. Ahí ya se empieza a construir la historia.
15. El factor sorpresa es fundamental para el descubrimiento porque cuando llega el reportero al lugar, sin previo aviso, no hay posibilidad de que los otros construyan una fachada.
16. Hay que pensar en los desafíos técnicos. Por ejemplo, para el reportero es vital tener siempre un micrófono de mano pues captar los sonidos puros es de vital importancia en la edición. Cómo se registra el grito de una persona, una bomba... Eso no se logra con un micrófono multidireccional. El sonido habla mucho y es una forma muy efectiva para captar la atención del espectador.
17. Cada reportero tiene que saber hasta dónde llega. Lo importante es la determinación de cada quien y el proceso de coordinación.
18. El reportero debe estar formado para estar en la calle, pero es la calle la que determina cada uno de sus pasos.
19. Siempre hay que buscar las alternativas que el sitio ofrece pero sin esconder la condición de reportero. Cuando hay hostilidad uno debe comprender el por qué de eso.
20. Mostrar siempre la historia oficial pero también la de las víctimas. Si se muestran los dos lados se rompe el muro que existe, las barreras de las diferencias en la relevancia.
21. Hay que dejar claro en el reportaje la diversidad de ideologías, orientaciones políticas, sexuales, religiosas, culturales y económicas.
22. Hay infinitas posibilidades para volver más atractivo el documental, una de ellas es a través del guión, donde se elige lo que se revela y lo que se va a esconder para que sea el espectador quien experimente el placer de irlo descubriendo. Ésta es una estrategia para conectar con el espectador y conducir la narrativa.
23. Todas las decisiones que se tomen en el guión y en la edición deben ser muy conscientes y pensando en la audiencia, en la hora del día que se emite el reportaje, etc. Sin embargo, cada historia es muy específica y en ese sentido se tiene que plantear el guión. Por eso no hay una única fórmula.
24. Las narrativas se construyen por contraste. Pero es básico tener en cuenta tres elementos: el contexto, la acción y la historia del ser humano, la complejidad del personaje.
25. En la edición del reportaje se deben tener en cuenta los tiempos que se dedican a cada momento: la narración, la acción, el sonido, los espacios vacíos, los silencios, etc. Es una forma de cambiar a una narrativa más interesante.
26. Cuando se vaya a la calle a grabar, hay que intentar pensar qué recursos se van a usar en la edición.
27. El reportero es siempre el observador, el narrador de la historia, el que acompaña de cerca los acontecimientos. Cuando éste visita y está con la comunidad por horas, días, el proceso de aproximación empieza a gestarse y el conflicto a aparecer. Su mayor tarea es registrarlo. Cuanto más fuerte sea el conflicto, más fuerte será también la narración. La función del reportero es convertirse en intermediario entre la historia, las personas y el gran público. El reportero es la conciencia.
28. El reportero debería buscar no un conflicto explícito, eso sería muy simple, sino uno que sea más complejo. Y recordar que cada persona guarda algo conflictivo.
29. Dejarse sorprender, permitir que el descubrimiento sea más intenso.
30. Si el reportero descubre un punto de dificultad eso se convierte en algo excelente para el trabajo. Ahí está el conflicto. Depende de su habilidad constituir una situación para que el público le ayude a llegar al fondo, que desee saber más sobre el tema. Descubrir ese conflicto en la calle es esencial. Cuanto más tiempo pase en la calle, más oportunidad tiene de descubrirlo.
31. Debe haber un interés genuino por la gente. Entender al ser humano desde su complejidad. No solo saber sobre sus crisis, sus sufrimientos.
32. Uno debería perseguir los procesos de transformación de los personajes. Y eso se registra solo si el reportero los acompaña desde el comienzo hasta el final.
33. El reportero debería buscar personas con historias y acciones interesantes. Las pequeñas acciones cotidianas nos traen historias emocionantes.
34. La persona que es señalada como culpable merece un respeto mucho mayor por parte del reportero, mucha más atención.
35. Hay que ser responsables y consecuentes. Lo más importante es establecer relaciones correctas, sinceras con la gente.
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