CUANDO TE RECUERDO
(fragmento)
Raro es el día en que no ocurra. Al instante de pensar en ti, el alma, la inmortalidad se hacen presentes; tu metamorfosis de oruga humana, un estado de disolución. Una criatura celestial alada de un terso blanco. La gran diosa celta, el fuego, el ocio ilimitado, la alegría de saber que sigues aquí. En mis libros, en mi educación, en mis enseñanzas, en mis recuerdos, en mi apellido. Bajo las grises infamias del tormento ajeno, sigues ahí, en un vuelo disonante contra el viento.Pudiera parecer el día más improbable de que te viera pero siempre llega a mi una sonrisa al asomar por la ventana del camión, al levantar la mirada en las aceras, al encontrar respuestas en las preguntas echas al viento. Siempre estás ahí cuando te busco en la memoria, cuando te pregunto en la penumbra. Al asomarme a los recuerdos y no reprimir las lágrimas y esconderlas a la vista. Es tan agradable y extraño el sentimiento de tenerte tan lejos y encontrarte cuando alzo la vista; en ocasiones provocas mi atención y ahí estás. En otras, simplemente coincidimos y reímos. Siempre reímos.
Raro es el día en que no ocurra. Al instante de pensar en ti, el alma, la inmortalidad se hacen presentes; tu metamorfosis de oruga humana, un estado de disolución. Una criatura celestial alada de un terso blanco. La gran diosa celta, el fuego, el ocio ilimitado, la alegría de saber que sigues aquí. En mis libros, en mi educación, en mis enseñanzas, en mis recuerdos, en mi apellido. Bajo las grises infamias del tormento ajeno, sigues ahí, en un vuelo disonante contra el viento.Pudiera parecer el día más improbable de que te viera pero siempre llega a mi una sonrisa al asomar por la ventana del camión, al levantar la mirada en las aceras, al encontrar respuestas en las preguntas echas al viento. Siempre estás ahí cuando te busco en la memoria, cuando te pregunto en la penumbra. Al asomarme a los recuerdos y no reprimir las lágrimas y esconderlas a la vista. Es tan agradable y extraño el sentimiento de tenerte tan lejos y encontrarte cuando alzo la vista; en ocasiones provocas mi atención y ahí estás. En otras, simplemente coincidimos y reímos. Siempre reímos.
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