¿Quién eres extraño?

Odio cuando escribes, odio cuando señalas tu estado de ánimo, en verdad que sí. Siento que me revolotean las entrañas al leer tus letras, al ver tus fotos. Sí, las tuyas también. ¿Te crees tan importante?¿Tan intelectual? Pero me llena de coraje el no decirte algo, lo que sea, aun si se tratara de una mentira, un ácido engaño y levantar tu estima; alimentar tu mediocridad. Claro, no te sientas tan importante, porque no es a ti, ni a ti, a quien detesto más. Aborrezco cuando contesto con verdad y aplaudo tus silencios entre cuentos, tus sombras en las fotos. Me recuerda que yo no hago nada parecido, rara vez un intento, ¿Ser mejor? eso que importa si todo lo guardo, lo dejo flotando en pesadillas que en algún tiempo perdido en la noche fueron sueños. Odio verme y no hacer nada al respecto.